lunes, 8 de agosto de 2011

random


Capitulo 1

El viento sopló en la lúgubre habitación, tan lúgubre que los rayos del sol escapaban de ella ocultándose en las nubes, tratando de reanimar inútilmente a la figura envuelta en sabanas recostada sobre la cama. Tras varios intentos, solo logro descubrir el rostro del joven que ahí dormitaba, desahuciado; momentos después, una luz dorada toco su mejilla, menoscabando el ambiente del lugar y dándole la fuerza necesaria al muchacho de recobrar la consciencia. Con unos cuantos movimientos torpes de los ojos, observo el lugar algo vahído y torpe, como si fuese la primera vez que se mueve en mucho tiempo. Sus pensamientos eran vanos, no sabía donde estaba o como había llegado a ese lugar. Su memoria era un revuelo de sombras y sonidos ininteligibles que producían una fuerte molestia. Se tomo su tiempo para acostumbrarse a la habitación, sin tomarse la molestia en recordar nada para evitar el dolor. El viento sopló más fuerte, alegrándose de su despertar.
— ¿Dónde…? — sus balbuceos apenas entendibles revelaban su falta de energía.
Se recostó de nuevo en la muy cómoda cama para recuperar el control de su cuerpo. Aun delirando, se arriesgo a sumergirse en la tormenta de su mente, todo era un caos, sus recuerdos y memorias habían dejado un espacio muy grande en ella, que fue ocupado rápidamente por confusión, miedo, ira, tristeza, melancolía; todo un coctel de sentimientos que ponían en peligro su integridad como persona y su cordura si no eran bloqueados a tiempo.
Abrió lo ojos pare distraer su atención del desastre que se alojaba en su cabeza. Se preguntaba como era posible que una mente como la de él quedara en ruinas considerando por lo que había pasado antes, se preguntaba que sucedió y por qué quedo en un estado tan decrepito. Decidió tratar de levantarse de nuevo a pesar que sus músculos desvaían con el más ligero esfuerzo que se les imponía. Con unos cuantos gemidos logró sentarse, algo mareado por la falta de nutrientes en su sistema y con una ligera migraña por viejas heridas; se examinó detenidamente para ver su estado físico y, considerando los daños en su cerebro, no se sentía muy alentado de hacerlo. Si su cuerpo estaba tan mal o peor condición que su mente…
Descarto la idea incluso antes de que se formulara completamente.
No tengo que ser tan negativo. Además, solo hay una sola cosa que puedo hacer por ahora y es ver que tal estoy. Pensó para si mismo.
Lo primero que probó fue la movilidad de sus articulaciones y sus huesos y se movían bastante bien, tampoco sentía ninguna fractura, así que, obviando la parte donde no tenia fuerzas, levantarse de la cama era factible.
Bien, hasta ahora voy bien. Lo que probó después fue si tenía alguna herida que requiera una atención especial. Trato de encontrar vendas, y el alivio de no encontrar ninguna lo embargo en una emoción casi indescriptible.
Dejó que los rayos de sol lo acariciaran de nuevo cuando las nubes se despejaron, arrancándole cualquier imagen negativa a la habitación y dejando ver un cuantioso decorado al estilo del siglo XVI.

miércoles, 13 de julio de 2011

Rouse, Capítulo 8: Mente sobre Materia

— ¿Patearme el trasero? Eres muy arrogante.
— Es de familia, entonces ¿Empezamos? Tengo personas a quien rescatar
— Lastima que esa pequeña misión tuya no podrá llevarse a cabo — las facciones superiores de su cara reflejaron una sonrisa encubierta por su extraña mascara —. No soy el único que protege este fuerte.
— Dime algo que no sepa  ¿¡Una trampa?! Mi madre no suele ser engañada tan fácilmente entonces... ¿Cómo rayos termino en esto?... Mejor le aviso a los demás.
Xavier... es una trampa — la voz de Carmen retumbó en la mente de él.
Si, lo se. Albert ¿Has encontrado dificultades?
¿Ah? Ehm no, todo ha ido con normalidad ¿Ha pasado algo?
Albert, tu siempre tan perspicaz... Es una trampa, cuidado que hay un grupo de mercenarios ayudando. Carmen, debo suponer que te encontraste con uno.
Lo estoy viendo justo ahora... es un Físico.
Eso significa que esto ha sido planeado, el que esté detrás de la cortina debe ser muy habilidoso como para engañar a mi madre.
¿Qué debemos hacer?
Debemos apartar la basura del camino
— ¿Qué pasa? ¿Te estas arrepintiendo de haberte encontrado conmigo? — dijo el pálido encapuchado.
— Mira quien es arrogante ahora... bueno haz tu jugada, no tengo toda la tarde.
— Cuanta insolencia —su cara mostraba placer.


Movió su brazo derecho y fue materializando 3 espadas en dirección a Xavier, luego las espadas salieron disparadas a él. Por supuesto que Xavier las detuvo antes de que tocaran su cuerpo. Una cuarta espada fue materializada a sus espaldas pero Xavier sintió el cambio de materia y detuvo la espada antes de que atravesara su piel. Por último unos cuchillos pequeños aparecieron arriba pero como era de esperarse, las detuvo antes de que tan siquiera empezaran a bajar.
— ¿Eso es todo lo que tienes? Para ser un mental es algo débil.


La pelea continuó así en ese orden, ellos apenas se movían mientras se lanzaban objetos contundentes a ver si lograban pegarse. Xavier descubrió el patrón, podía solo proyectar un máximo de cinco objetos y necesitaba 5 segundos para recuperarse después de cada ronda. Con esa información obligo a Alejandro a materializar cuatro objetos para defenderse y luego, por influencia de Xavier, invocó uno quinto para usarlo de proyectil. En ese momento Xavier imaginó que varias correas ataban su corazón y pulmones, desmayando a su enemigo eventualmente. Luego, con unos tubos, lo inmovilizó antes de que recuperara el conocimiento y le tapó los ojos por seguridad.
Serán mercenarios pero son muy débiles.
Habla por ti, el mío puede sentir cuando y donde aparecerá un portal. Ha esquivado todos y cada uno de mis ataques, negro y ciego tenía que ser... — Carmen trato de bromear, en realidad el sujeto sentía mejor el ambiente a su alrededor cuando todo estaba oscuro, así que cerraba los ojos.
— ¿Tu no tienes un espacio dentro de ti que tu controlas? — Albert apareció en la conversación fantasmalmente.
Pero solo podría mantenerlo por unos cuantos segundos... lo intentaré


Xavier siguió caminando muy atento a la sala de chat que tenia en su mente.
— ¡Lo vencí! Jaja, no se metan con Carmen.
Dices eso después de que ibas perdiendo...
No me jodas, Xavier. No todos somos unos expertos en todo tipo de habilidades mentales, algunos nos tenemos que esforzar para ganarnos el titulo.
Calma fue solo una broma... por cierto, ¿Sabes a donde vas? yo ni siquiera se donde estoy.
Espera yo tampoco — la risa mental de Carmen inundo la mente de todos —. Lo mejor será seguir caminando a ciegas.
Encontré algo — la voz de Albert de nuevo asusto a todos con sus frases repentinas —. Según un boletín que había en el piso, hay prisioneros nuevos en la celda F-2.
Nos encontraremos ahí en diez minutos, entonces.
Oh oh... me encontré a alguien. Creo que es Crash.
— ¿Trash? Creo que hoy tendré mi revancha — Carmen irradiaba entusiasmo en cada palabra que pensaba.
No, nuestra prioridad es rescate, no revancha. Tendrás tu oportunidad en otro momento. Alebert ¿Te puedes encargar de él y alcanzarnos luego?
Claro, dame unos minutos. Esto sera pan comido...


Rouse, Capítulo 9: Elementales. Donde agua y tierra se unen para dar paso a la destrucción, donde una mascara se cae para dejar al descubierto el rostro, donde un capricho del titiritero hace que sus marionetas paguen las consecuencias, ahí es donde la verdad se retuerce en el destino de los demás, jugando con la mente de aquellos a quienes arrastra consigo.

Rouse, Capítulo 7:Desventaja

La única forma de entrar era a través del pequeño puerto que daba al mar. Una gran cantidad de agua se elevó del oceano y empezó a tomar forma humana y a congelarse en lo que parecía una armadura.
— Llamar la atención... ¿Esa frase tiene significado para ti, Albert? — Xavier se molestó un poco por el gran sentido de discreción de Albert.
— Aumentaré la neblina y no nos veran; tú ocúpate de los radares.

Xavier, sintiéndose como perro regañado, creo una barrera que evitaba que las ondas de los radares se regresaran a los receptores y así se obvia la parte donde los descubren.
Después de unos segundos tanteando en la neblina lograron tocar puerto, Albert compactó el agua que había levantado antes y la volvió unas esferas minúsculas si la comparamos con lo que era antes. Decidieron entrar en cuanto Xavier se deshizo de los vigilantes.
Muy bien — dijo a los demás por medio de su mente —, los calabozos especiales para Rouses están en lo mas profundo del recinto.
 Entonces ¿Debemos separarnos? — a Carmen no le gustaba esa idea.
 El lugar esta lleno de fuerzas de contención, no creo que sea factible separarse; sin embargo, el lugar es enorme y nos llevara tiempo revisar todo. Creo que es mejor separarse. De igual forma, ustedes están lo suficientemente grandes como para cuidarse solos — Xavier sonrió al pensar esa frase.
Muy gracioso, ¿Cómo nos mantendremos en contacto?
Vía telequinetica, claro. Mantendré la conexión con ustedes, solo deben decir mi nombre, Albert. Ok, que empiece la operación. Repórtense cada 30 minutos.

Los tres se metieron en la base de Avalon. Se fueron separando a medida que los corredores se dividían con una precisión que le daría envidia a los generales militares. Dando vueltas de aquí para allá, buscaban algo que les diera un indicio de la ubicación de los secuestrados. Iban tumbando a los guardias y evitando que las cámaras los vieran usando sus habilidades.
En un golpe de suerte, Xavier se encontró con un mapa del lugar pegada a la pared. Ahora que lo pienso, los guardias se deberían de saberse este lugar de pies a cabeza. Pero ¿Qué es mejor que un mapa en una situación así?
— Al parecer... me encontré con una rata — una voz salió de la esquina mas cercana, junto con un hombre de casi 2 metros de altura envuelto en una gabardina negra con capucha que apenas dejaba ver su pálida cara y sus azules ojos. Su boca era tapada por una especia de mascara de oxígeno, también negra.
— Oh ¿Te referías al reflejo tuyo en el espejo? — respondió Xavier con toda la naturalidad del mundo. Hagamos conexión mental con él. Pero se le hacia difícil tan siquiera escuchar sus pensamientos. Acaso... —. Así que eres un Mental, interesante.
— Veo que eres hábil, lástima que ese truco mental no te ayudara a vencerme. Soy inmune a tu telepatía.
— Pero no lo eres a las cosas que te rodean.


Inmediatamente después, un tubo de gas se rompió provocado por un pensamiento de Xavier y dirigió su tóxico gas a la cara del sujeto. El gas estaba tan concentrado que se podía notar a simple vista y por eso fue que Xavier se dio cuenta de que éste nunca toco el cuerpo de su contrincante. Pero ¿Cómo? No veo nada que me haga creer que controla el aire... probemos con tierra. Fracturó el piso y lo compactó en forma de conos, los proyectiles salieron disparados a penas se definía su forma. El sujeto, al ver que se aproximaban, sacó una espada de ningún lugar y cortó los conos con suma facilidad. Es obvio que este tipo no usa elementos, tal vez use espacio o sea un warper igual que Carmen... tengo una idea.
Xavier imaginó una cuerda que enredaba sus piernas y lo elevaba y otra que el quitara su espada, en efecto ambas cosas sucedieron pero en vez de manipular el espacio como Carmen, este tipo solo se molestó en golpear a Xavier por atrás con un bate. Lo esquivó solo con unos milímetros de distancia pero fue suficiente pare desconcentrarlo y hacer que perdiera el control de su telequinesis.
— No te será tan fácil vencerme.
— Nunca me he enfrentado contra alguien que proyecte objetos en su mente y los materialice en la realidad — dijo Xavier levantandose, el tipo se quedó cayado. Así que sí es tu poder — ¿Me dices tu nombre?
— Alejandro Visciglio.
— Bueno el mio es Xavier Adler, y seré quien patee tu proyctador trasero fuera de mi camino...


Rouse, Capítulo 8: Mente sobre Materia. Cada vez más difícil de moverse, las paredes se hacen mas pequeñas a medida que mi perseguido se siente más acorralado. Visitando un lugar que nadie puede tocar pero que todos pueden percibir, un extraño es juzgado por una luz morada; que no da otra sentencia aparte de morir.

viernes, 27 de mayo de 2011

Rouse, Capítulo 6: Misión

Mientras Xavier bajaba la colina de forma muy genial como el pensaba, se encontró con su madre, Caroline.
— Madre... que "casualidad" encontrarte aquí.
— Xavier — dijo en tono represor —. Solo vengo a decirte que decidimos acerca de tu castigo, aparte de no dejarte salir y tu clase claro.
— Supongo que estaré confinado a esta ciudad por un mes...
— Algo así, pero necesito que vayas en una misión al noreste de Canadá, a la Península de Avalon.
— ¿Ahí no es donde esta una base militar de la ETMAR*?
— Recibí información ayer de que unos Rouse están confinados en esa base... llevan ahí 5 horas.
— Quieres que los recate — concluyó Xavier
— Si no es mucha molestia, claro.
— ¿Qué gano yo?
— Una ayuda a recuperar tu Clase, tal vez no lo parezca pero se que te molesto algo el no ser SS.
— Eso no lo puedes saber.
— Xavier... soy tu madre y soy la persona que te enseño a usar tus habilidades telequinéticas y empáticas, no me puedes engañar con una actuación — su madre solo sonreía. Ella y sus juegos mentales.
— Esta bien; parto en una hora. Avísale a Solem de mi salida.
— ¿Con quién crees que hablas? — endureció la cara pero no lo suficiente como para mostrar enojo, sino 
— Supongo que ya sabe de eso ¿No? — su madre solo sonrió de nuevo, confirmando —. Entonces me voy, nos vemos en unos días, Madre. 
— Seguramente no regreses... — dijo susurrando mientras su hijo se alejaba —. Esto... sera divertido...


Xavier llamo telepáticamente a Carmen, Albert y a Travis y los... agrego a una "conferencia mental".
Necesito gente para una misión a la Península de Avalon, ¿Quién se anota? — les dijo a todos.
¡Yo voy! — gritó Carmen, siempre animada por salir de la ciudad a divertirse.
Yo también voy, Xavier. ¿A quién hay que rescatar esta vez? — dijo Albert.
 Yo me temo que no puedo, tengo unos asuntos que atender — declinó Travis.
 ¿Asuntos? — pregunto Xavier.
Después les explico, me dicen que tal les fue.
Bueno, a los que si van nos vemos en cuarenta minutos en la caseta de salida. Lleven ropa abrigada, chicos.


A los cuarenta minutos exactos llegaron todos, justo como acordó Xavier, sabiendo cuan meticuloso era él. Solem tomó nota de su salida y Carmen abrió el portal hacia la península, entrando en el con unos ánimos muy altos para la misión.
Llegaron al este de la península, había niebla que impedía la visibilidad pero Albert la disipó lo suficiente como para ver a lo lejos pero no tanto como para que no lo vieran.
— ¿Plan? — preguntó Carmen.
— Carmen, si no ves a donde vas no puedes abrir un portal ¿cierto? — Xavier parecía tenerlo.
— Cierto.
— Entonces tendremos que entrar a mi manera. Albert, ya sabes que hacer.
— Es hora de los Golems...


Rouse, Capítulo 7: Desventaja. Intentando no respirar fuego en el infierno, tratando de no caer de un hilo, enfrentándose a enemigos que destruirían un continente, entramos en la boca del lobo para no salir sin nuestro... ¿Objetivo? ¿Desde cuando mandan guerreros a buscar semillas quemadas?


*Notas: ETMAR: Entidad de Tratado y MAnejo de Rouses

Bleach Saga "Escuadrón Zero", Capitulo 6: ¿Descanso?

— Usagita... ¿No has visto a Ooki? — preguntó Mizuki mientras caminaban a la cede del Escuadrón 12.
— No he recibido noticias de él en los últimos 2 días. No crees que... — se detuvieron y la tensión en el ambiente aumento.
— ¿... Esté entrenando ( :D )? — rompiendo completamente con la tensión —. Ese Ooki, ¡yo quiero entrenar con él!
— Ay, Mizuki ¿Qué haremos contigo? — parecía ya acostumbrada a la bipolaridad de Mizuki —. Ahora en serio ¿Qué vamos a hacer?
— Bueno, tu no se. Vete a jugar por ahí ( \o/ ), yo voy a donde Mayuri y los otros a ver como van. Por cierto, tengo nuevas estrategias para tu Bankai.
— Sabes muy bien que nadie en estos mundo puede hacerme liberar el Bankai.
— Pero debes estar preparada; hazlo por mi ¿Sí? — puso una cara de encanto con sufrimiento difícil de rechazar.
— Esta bien, Mizuki — se rindió completamente a esa cara —. Nos vemos luego.


Caminando hacia el Escuadrón, Mizuki se encontró con Nanao. Esta, al verlo, no pudo evitar ponerse nerviosa y rígida.
— ¡Mu-muy buenos días, Capitán Comandante Mizuki Kurohi-sama!
— Nanao-chan... estas muy tensa — el "-chan" al final le recordó a Nanao alguien que en ese momento quería olvidar — ya se ¿Te gustaría acompañarme un momento? Tal vez un momento conmigo te calme los nervios ( ;D ) y además quiero jugar con unas cosas que están creando — su sonrisa iba de oreja a oreja
— No, no hay problema — Pero ¿Qué...? Un niño intenta seducirme... ¿Cómo alguien así llega a ser comandante?


Caminaron un rato y llegaron al nido de ratas donde los tres científicos hacían su trabajo asignado por el Escuadrón Zero. Los 3 estaban muy concentrados en unos artilugios en la mesa como para darse cuenta de su presencia. Su atención estaba dirigida a un objeto en particular. Algo parecido a un reloj... solo si querías tener un reloj de péndulo en tu antebrazo. Era alargado, tal vez de unos 15 centímetros; negro como el azabache y tenía unas esferas rojas, cuatro, repartidas por la parte superior. Un poco inquietante ese aparato. A Mizuki se le ocurrió una idea muy infantil pero que seguro lo divertiría. Pronunció unas cosas como un bakudo para aumentar el tono de voz unas 100 veces y tomó todo el aire que sus pre-adolescentes pulmones podían tomar.
— AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA —y gritó con tanta fuerza que el edificio amenazaba con caerse abajo.
— Pero ¿Qué demonios...? — Kisuke se sobresalto — Mizuki-kun, ¿Quieres arruinar el trabajo?
— Se supone que nadie puede entrar aquí — resaltó Mayuri.
— Estoy donde me plazca — esas palabras desbordaban tanto altanería como razón —. ¿Cómo van con el escudo?
— Sorprendentemente, es estable — dijo Kisuke —. Lo estamos repartiendo por la Sociedad de Almas en forma de pentágono y lo activaremos entre hoy y mañana.
— Que eficiencia — resaltó Mizuki divertido — y...
— Tres están listos — se apresuró a decir Szael, mirando de reojo a Nanao —. Logramos insertar la energía de Kurosaki Ichigo, Uryuu Ishida y Yasutora Sado, solo falta... — hizo una pausa mientras revisaba unos papeles — Inoue Orihime la cual no puede salir sin su-
— Perfecto; entonces, vengo en un momento por Inoue — interrumpió Mizuki sabiendo el resto de la información. 
No logro entender  pensaba Nanao —. Se me había informado que se levantaría una barrera para evitar que algo como el inconveniente de hace dos días pasara de nuevo; y según Kyouraku-taicho, los Ryokas no participarían en esto y por eso fueron encerrados en la Torre de Arrepentimiento... ¿Qué quieres hacer, Mizuki-sama?


Llegaron a la Torre más rápido de lo normal por que Mizuki iba por los "caminos verdes". Una vez abierto, saco a Orihime y tranquilizó a Ichigo con un "Estará bien" que ya se preparaba para atacar aun estando debilitado por las paredes de la construcción. Se montó a las dos en los hombros y con un solo shunpo llego a la entrada del escuadrón de nuevo. Se le veía ansioso. Mayuri ensancho aun más su permanente sonrisa al verlos entrar y le puso inmediatamente el dispositivo que no tenía ninguna luz roja encendida, la vistieron como shinigami y le extrajeron un poco de reiatsu para analizar. Inoue estaba muy confundida, pero aceptó todo sin replicar.
— Muy bien, ya que no tengo nada que hacer y ustedes tampoco ¿Me acompañan a otro lugar?
— Ehm... yo no se... Etto... ¿A donde? — preguntó Inoue mientras Nanao solo permanecía inerte.
— A la Dimensión del Rey a buscar a unos amigos — respondió con una sonrisa convencedora.
— Bueno si no toma mucho tiempo... — Nanao se veía interesada; Inoue solo asintió.
— De acuerdo. ¡A LA PUERTA SENKAIMON!


Pero en un lugar oscuro, lúgubre, húmedo, estaba una sombra recibiendo una información de alguien... Ooki. 
— Planean una barrera... — salió una voz aguda, rasposa, y malvada desde esa sombra — como si eso pudiera hacer algo contra mi. Ooki, has sido de mucha ayuda los últimos mil años, seras recompensado.
— ¡Gr-gracias, Saigai-sama!
— Es hora de que mis hijos entren en acción...

domingo, 24 de abril de 2011

Rouse, Capitulo 5: Entrenamiento

— Bueno ¿De que querías hablar? — Pregunto Xavier mientras se dirigían al hospital.
— ¿Cuál es la habilidad de Elena? Tengo entendido que ella es Clase SS+ como Dustin.
— Ella es un amplificador — Travis se veía confundido —. Su habilidad consiste en acelerar o disminuir las transmisiones entre las neuronas, al hacer esto puede paralizar a una persona o mejorar sus capacidades cognitivas. En pocas palabras, si mejora eso en un mental, aumenta la concentración y la percepción del ambiente a su alrededor y por ende aumenta sus habilidades.
Travis quedo callado por un momento, luego pregunto.
— ¿Que pasaría si descubren como funciona su habilidad?
— Pues, estaríamos muertos ya que ella activa su habilidad por métodos tanto mentales como físicos.
Travis entendía lo que pasaría si eso sucedía. 
El resto del camino estuvieron callados. Travis estaba perdido en sus pensamientos.
Cuando por fin llegaron, Travis se quedó sentado afuera mientras que Xavier entraba a la habitación. Adentro estaban Albert y Carmen. El doctor a cargo estaba anotando en una hoja cuando Xavier entró.
— ¿Cómo esta?
— Podría estar mejor. De todas formas, la estamos tratando con los mejores especialistas en regeneración que tenemos. Esta fuera de peligro pero no saldrá de esta habitación en un tiempo.
La cara inquebrantable de Xavier paso a tener un alivio casi angelical. Incluso una lágrima surgió de su ojo derecho, pero la oculto antes de que alguien la notara.
— Xavier — una voz de afuera capto la atención de todos.
— ¿Axel? 
— Vaya. Tiempo sin verte ¿Qué has estado haciendo todos estos años?
— ¿Se... conocen? — pregunto Carmen.
— Claro — respondió Axel —. Estuvimos juntos en las sesiones de entrenamiento. Ahora yo estoy a cargo de ellas.
— Pff, creí que querías ser parte del concejo.
— Voy mejorando. Antes no tenía trabajo. Oye, ¿Te interesaría venir a una sesión mañana? Los novatos que tengo son un gran problema.
— Ok, igual no tengo nada que hacer.
— Excelente. Nos vemos mañana.
Y así tan pronto como se integró, se fue.  Sera divertido humillar a unos novatos.
El día paso sin irregularidad. Xavier estaba ansioso por ver de que eran capaces los nuevos. 
El día siguiente llegó y Xavier se dirigió al lugar de entrenamiento. Estaba en el oeste y en la cima de una colina. Cuando llega, ve que Axel tiene problemas para controlar a los novatos y decide hacer algo.
— Ustedes, ilusos, deberían comportarse mientras están en la presencia de alguien como yo — dijo mientras salia de la oscuridad.
— Pero si es Xavier — dijo uno de los niños con rasgos irlandeses —. Escuche que fuiste degradado a Clase C por el concejo ayer ¿Qué se siente ser parte de la muchedumbre?
— Para que lo sepas, fui degradado en Clase, no en habilidad. Aun puedo destruir una ciudad entera si quiero.
— Eso es algo que podemos probar ahora — dijo el otro chico con rasgos irlandeses. Son gemelos... Puede que uno se complemente del otro.
— Empecemos.
A los pocos segundos los gemelos salieron corriendo. El otro se quedó atrás. Los tumbaré.
— Salten — les grito el que se quedó atrás. Los gemelos hicieron lo que les indicó. Ese chico... Los golpearé por la derecha.
De nuevo el chico les grito algo, uno de los gemelos pareció absorber la energía de la telequinesis. Los gemelos se acercaban. Basta de juegos. Xavier visualizó que amordazaba a los 3, unos pocos segundos después cayeron al piso completamente inmovilizados. Luego, los colgó cabeza abajo en un árbol.
— Pidan perdón y tal vez considere bajarlos.
— Primero muerto — gritó un gemelo.
— Taixen ¿Qué pasó? — gritó el otro gemelo.
— Nos amordazó. No me dio tiempo de avisarles por que primero tras de mí. No fue mi culpa, Liam, Brian.
— Bájanos para darte tu merecido — Xavier supuso que era Liam por como los nombró y miró Taixen.
— Unos gemelos que absorben energía cinética y pura y alguien que siente las intenciones de los demás. Interesante grupo, hubieran ganado si no fuese sido yo su enemigo. Axel, supongo que ya sabes que puedes hacer ¿no?
— Creo. Tendré que aumentar el grado de dificultad. Es hora de la venganza — tenía una mirada maquiavélica que le produjo nostalgia a Xavier. Se retiró mientras tiraba al piso a los chicos.
— Cuando se consideren lo suficientemente buenos, me vienen a buscar. Estaré esperando con ansias ese día...