viernes, 27 de mayo de 2011

Bleach Saga "Escuadrón Zero", Capitulo 6: ¿Descanso?

— Usagita... ¿No has visto a Ooki? — preguntó Mizuki mientras caminaban a la cede del Escuadrón 12.
— No he recibido noticias de él en los últimos 2 días. No crees que... — se detuvieron y la tensión en el ambiente aumento.
— ¿... Esté entrenando ( :D )? — rompiendo completamente con la tensión —. Ese Ooki, ¡yo quiero entrenar con él!
— Ay, Mizuki ¿Qué haremos contigo? — parecía ya acostumbrada a la bipolaridad de Mizuki —. Ahora en serio ¿Qué vamos a hacer?
— Bueno, tu no se. Vete a jugar por ahí ( \o/ ), yo voy a donde Mayuri y los otros a ver como van. Por cierto, tengo nuevas estrategias para tu Bankai.
— Sabes muy bien que nadie en estos mundo puede hacerme liberar el Bankai.
— Pero debes estar preparada; hazlo por mi ¿Sí? — puso una cara de encanto con sufrimiento difícil de rechazar.
— Esta bien, Mizuki — se rindió completamente a esa cara —. Nos vemos luego.


Caminando hacia el Escuadrón, Mizuki se encontró con Nanao. Esta, al verlo, no pudo evitar ponerse nerviosa y rígida.
— ¡Mu-muy buenos días, Capitán Comandante Mizuki Kurohi-sama!
— Nanao-chan... estas muy tensa — el "-chan" al final le recordó a Nanao alguien que en ese momento quería olvidar — ya se ¿Te gustaría acompañarme un momento? Tal vez un momento conmigo te calme los nervios ( ;D ) y además quiero jugar con unas cosas que están creando — su sonrisa iba de oreja a oreja
— No, no hay problema — Pero ¿Qué...? Un niño intenta seducirme... ¿Cómo alguien así llega a ser comandante?


Caminaron un rato y llegaron al nido de ratas donde los tres científicos hacían su trabajo asignado por el Escuadrón Zero. Los 3 estaban muy concentrados en unos artilugios en la mesa como para darse cuenta de su presencia. Su atención estaba dirigida a un objeto en particular. Algo parecido a un reloj... solo si querías tener un reloj de péndulo en tu antebrazo. Era alargado, tal vez de unos 15 centímetros; negro como el azabache y tenía unas esferas rojas, cuatro, repartidas por la parte superior. Un poco inquietante ese aparato. A Mizuki se le ocurrió una idea muy infantil pero que seguro lo divertiría. Pronunció unas cosas como un bakudo para aumentar el tono de voz unas 100 veces y tomó todo el aire que sus pre-adolescentes pulmones podían tomar.
— AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA —y gritó con tanta fuerza que el edificio amenazaba con caerse abajo.
— Pero ¿Qué demonios...? — Kisuke se sobresalto — Mizuki-kun, ¿Quieres arruinar el trabajo?
— Se supone que nadie puede entrar aquí — resaltó Mayuri.
— Estoy donde me plazca — esas palabras desbordaban tanto altanería como razón —. ¿Cómo van con el escudo?
— Sorprendentemente, es estable — dijo Kisuke —. Lo estamos repartiendo por la Sociedad de Almas en forma de pentágono y lo activaremos entre hoy y mañana.
— Que eficiencia — resaltó Mizuki divertido — y...
— Tres están listos — se apresuró a decir Szael, mirando de reojo a Nanao —. Logramos insertar la energía de Kurosaki Ichigo, Uryuu Ishida y Yasutora Sado, solo falta... — hizo una pausa mientras revisaba unos papeles — Inoue Orihime la cual no puede salir sin su-
— Perfecto; entonces, vengo en un momento por Inoue — interrumpió Mizuki sabiendo el resto de la información. 
No logro entender  pensaba Nanao —. Se me había informado que se levantaría una barrera para evitar que algo como el inconveniente de hace dos días pasara de nuevo; y según Kyouraku-taicho, los Ryokas no participarían en esto y por eso fueron encerrados en la Torre de Arrepentimiento... ¿Qué quieres hacer, Mizuki-sama?


Llegaron a la Torre más rápido de lo normal por que Mizuki iba por los "caminos verdes". Una vez abierto, saco a Orihime y tranquilizó a Ichigo con un "Estará bien" que ya se preparaba para atacar aun estando debilitado por las paredes de la construcción. Se montó a las dos en los hombros y con un solo shunpo llego a la entrada del escuadrón de nuevo. Se le veía ansioso. Mayuri ensancho aun más su permanente sonrisa al verlos entrar y le puso inmediatamente el dispositivo que no tenía ninguna luz roja encendida, la vistieron como shinigami y le extrajeron un poco de reiatsu para analizar. Inoue estaba muy confundida, pero aceptó todo sin replicar.
— Muy bien, ya que no tengo nada que hacer y ustedes tampoco ¿Me acompañan a otro lugar?
— Ehm... yo no se... Etto... ¿A donde? — preguntó Inoue mientras Nanao solo permanecía inerte.
— A la Dimensión del Rey a buscar a unos amigos — respondió con una sonrisa convencedora.
— Bueno si no toma mucho tiempo... — Nanao se veía interesada; Inoue solo asintió.
— De acuerdo. ¡A LA PUERTA SENKAIMON!


Pero en un lugar oscuro, lúgubre, húmedo, estaba una sombra recibiendo una información de alguien... Ooki. 
— Planean una barrera... — salió una voz aguda, rasposa, y malvada desde esa sombra — como si eso pudiera hacer algo contra mi. Ooki, has sido de mucha ayuda los últimos mil años, seras recompensado.
— ¡Gr-gracias, Saigai-sama!
— Es hora de que mis hijos entren en acción...

No hay comentarios:

Publicar un comentario